Hace mucho que no escribo. De hecho, esta es la primera entrada del 2012, curiosamente un par de meses antes de que finalice. Supongo que no importa, las cosas que se hacen porque sí no tienen plazos, ni fecha tope, ni nada de eso...
Ayer comí atún al horno, y el atún, según indicaba el envase venía de Ecuador. Quito, su capital, queda a unos 9700 km de Londres, que es a dos horas y media de donde estoy, y donde está Sainsbury, que es el supermercado donde lo compré. Un atún que viaja casi 10000 km, ¿qué clase de atún es?
Me gusta el pescado, pero cuando descubrí de donde venía me preocupé un poco, y pensé en qué clase de humanidad hemos construido en la que para comer atún y para seguir con nuestras vidas tenemos que implementar un sistema logístico que una dos regiones tan distantes como Inglaterra y Ecuador.
Los litros de petróleo que se van en el transporte del atún, los aviones, los embalajes, las horas de carretera, los cientos y cientos de peajes que habrán pasado antes de llegar a mi plato. El atún que me comí ayer venía de Ecuador y lo primero que me pregunté fue... si yo me como el atún de las aguas de Ecuador, en Ecuador, ¿qué comen?
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